En Asturias hay varios embalses para fines industriales o hidroeléctricos, aunque también se usan en actividades recreativas. En el río Navia están el de Salime (el mayor de los asturianos), Dóiras y Arbón. En el Nalón los de Tanes, Rioseco, Las Segadas, Alfilorios (junto con el Caudal) y Priañes (con el Nora). En el río Quirós está Valdemurio. En el Narcea La Barca y La Florida (Pilotuerto). En el Dobra La Jocica. En el Cares el de Poncebos. Y en el río Somiedo los saltos de La Malva, La Riera y Miranda.

La antigua ENSIDESA (ahora ACERALIA) cuenta con tres embalses para suministrar agua a sus factorías: La Granda y Trasona, sirven a la de Avilés; y San Andrés de los Tacones a la de Veriña-Gijón, que además son empleados para actividades náuticas-recreativas. Cerca esta La Furta, en terrenos de DuPont. Esos embalses, o pantanos, suelen ser importantes refugios de invernada para aves migratorias, por lo que las autoridades del Principado de Asturias tienen regulada la actividad cinegética y piscícola de forma rigurosa. Ahora la Consejería de Medio Ambiente no permite la caza en estos embalses, fundamentalmente para dejar tranquila a la avifauna que en ellos encuentra cobijo y refugio.

El de San Andrés de los Tacones o del río Aboño, situado en el concejo de Gijón, en las proximidades de la factoría de Veriña y del nudo, o "Y", de la autopista A-8, en Serín, es un gran lago artificial, a caballo entre las parroquias de Cenero, San Andrés de los Tacones (Montiana-Fresno) y Serín. Tiene una capacidad para cerca de cuatro mil metros cúbicos de agua.

Para visitar el embalse de San Andrés de los Tacones, se puede ir con facilidad por carretera, tanto por la A-8 (aunque al ser autopista no es para detenerse allí) o por la AS-326, así como por un ramal de la AS-18, junto a la Venta Veranes, o por la Abadía de Cenero. Siendo lo mas recomendable dejar el vehículo y dar un paseo, bien desde la AS-326, en Serín o Monteana, como desde la AS-18 (carretera de Gijón a Oviedo) por varios senderos, pistas o "carreterinas", en caminatas de una hora de duración... Pudiendo contemplar en estos recorridos restos arqueológicos, como las ruinas de Beloño o de Santa María de Veranes, así como el Torrexón (Torruxón) de Trubia de Cenero, la antigua Casa de Valdés y la Abadía de Cenero. Y el Centro de Seguridad Marítima Integral "Jovellanos", de Monte La Granda, en Veranes.

También se podría ir en tren de RENFE por Monteana-Serín, como así mismo en autobuses municipales de Gijón, saliendo los excursionistas de la plaza del Humedal, donde tiene la parada el autobús de la línea de Monteana y Serín. El autocar lleva a los viajeros por La Calzada y Poago, pudiendo contemplarse desde él, además de ACERALIA-Veriña, la ladera Oriental del Monte Areo. En Monteana (o Montiana) comenzará la andadura, de aproximadamente una hora, por pistas y senderos, que pasan entre verdes prados. Para llegar a un bar, en la carretera AS-326, donde se puede descansar (ya en la orilla norteña del embalse). Seguidamente se puede cruzar por un túnel, bajo la autopista A-8, y visitar el referido embalse. Primeramente se pasa la presa del mismo, para recorrer luego, en una media hora, sus orillas Oriental y Sur, hasta su cola (donde tributa aguas el río Aboño). El camino es irregular. Y tras la visita al embalse se puede seguir a la cercana localidad de Trubia de Cenero, en pocos minutos; o seguir hasta Serín, en media hora, por un pista de la orilla Occidental del embalse, cerca de Arroyo, Batiao y Naviella.

En este lago artificial se pueden ver ahora, curiosamente, varias cigüeñas, además de patos salvajes, fochas, gaviotas, cormoranes y garzas reales... Cerca de él, en Trubia, hay avestruces, en una finca particular.